LOS EXTRAÑOS

A finales de los 60 y principios de los 70 se empezaron a ver las primeras melenas y las primeras barbas en este país que aun tenia un difícil desarrollo por delante,una modesta renta per capita y una incipiente sociedad de consumo.Esos primeros hippies españoles eran jóvenes que se marginaban voluntariamente de esa sociedad establecida y que pretendían vivir en libertad.La mayoría de ellos eran jóvenes mayores de 23 años,de familias acomodadas y con estudios superiores ya iniciados y con actividades artísticas definidas que no recibían dinero de sus familias,con las que ya mantienen escaso contacto,y que llevan ya algunos años viviendo de sus propios medios.
Muchos de esos primeros hippies hispánicos parecían piratas estrafalarios y grotescos,estudiantes eternos que no pensaban mucho en el futuro y en todos los sentidos,con la curiosidad sublimada como bandera.Dormir en la playa o debajo de un pino,por una temporada,les compensaba de los blandos colchones de las casas de sus padres,y el contacto con otros como ellos,asi como cierto gusto por la aventura y la supuesta libertad de costumbres hippies,era su espejismo de un mundo de paraisos artificiales en los que el aspecto erotico jugaba un papel importante.
Por supuesto,estaba presente el peligro de las drogas y en casi todo un cierto snobismo con toques de papanatismo,pero sobre todo llamaban la atención a las viejas generaciones por sus aspectos inverosímiles y ese aparente desgarramiento social y moral.
Uno de los motivos de la aparición de los hippies en España fue la Guerra de Vietnam de la que llegaban los ecos,con las protestas juveniles y las manifestaciones en los Estados Unidos.Ya había quedado atrás la guerra de la generación de sus padres,y de alguna manera,los hippies españoles salieron victoriosos esta vez,en lo que era una especie de revancha de la Guerra Civil.
Ahora sonaban las canciones de Bob Dylan y Joan Baez,y se imaginaban sentados en los parques con flores en el pelo,intentando hacer realidad aquellas frases que estallaban en sus mentes como las mas peligrosas de las armas:Hacer El Amor No La Guerra era algo que solo se pensaba pero no se llevaba a la realidad,a no ser que quisieras pasar por el aro de el matrimonio.
Tampoco se les podía dar flores a "los grises" que machacaban a los estudiantes en las universidades y el pacifismo de las sentadas de protesta acababa con golpes de las porras.
Esos primeros hippies españoles eran una especie de héroes que solian acabar en las comisarias de las ciudades en donde,tras aguantar las palizas y los insultos machistas,equivocaciones de todo tipo y broncas,se les acababa cortando el pelo y mandando a casa aunque no la tuvieran ya.
Una cosa era ser un estudiante progre de universidad con infulas intelectuales de cine-club y barba de varias semanas y otra era ir con el pelo demasiado largo,pantalones de campana y camisas floreadas.
En muchos bares de las ciudades empezaron a proliferar los carteles en donde se reservaba el derecho de admisión o directamente se podían leer escritos a mano y con faltas de ortografía en donde se podía leer aquello de :"Se Prohibe La Entrada de Hippies,Beatniks,Melenudos y YeYe's".
Pero por otro lado,en las revistas del corazón y periódicos afines al gobierno,lo que mas estaba de moda,lo mas moderno,lo mas cool y lo mas In,eran los anuncios del tipo: " Fiesta Hippy de La Hija del Director General de Seguridad",o una colección de fotos de jóvenes pijos de la alta sociedad haciendo el hippie en las Baleares,todo pagado con el dinero de Papa.
Asi que en aquellos tiempos primerizos se distinguia rápidamente al hippie verdadero del que solo seguía una moda mas,y si algunos de esos hippies acababan terminando su carrera,casandose y con un trabajo normal y corriente,habia otros que se lanzaban a viajar por toda Europa,o acababan enganchados a la heroína,se iban a vivir a Formentera o La Gomera,montaban sus negocios propios de artesanía,o un pub con música en directo o una editorial de libros raros,incluso boutiques...

Los comienzos de los hippies españoles fueron tan duros que muchos de ellos se acabaron mezclando con los hippies extranjeros que llegaban a el país,llegando incluso a no querer hablar en su idioma.
Todo servia para seguir viviendo entre buenas vibraciones y al aire libre,todo servia para escapar de la ultraderecha rampante pero también de la izquierda,que seguía anclada en la barba y en los pantalones de pana.El hippie español sentía que aquella forma de vivir era la búsqueda de la propia personalidad,aunque eso significara marginarse de la sociedad.No se consideraban un movimiento filosófico,ni artístico ni político,eran los existencialistas españoles,siempre a la búsqueda de el contacto con una especie de verdad espiritual,siempre cercanos a la Naturaleza.
Esta especie de nueva raza vivía mejor en las islas o en las orillas del Mediterraneo,pero también cerca del Guadalquivir.En Cataluña estaban personajes únicos como Pau Riba y Jaume Sisa,que se crearon un mundo a su medida y que incluso llegaron a desaparecer en las Islas Baleares.
Mientras tanto,en las grandes ciudades del país,iba creciendo el movimiento en una especie de underground social y creativo de revistas y fanzines,de plantaciones secretas de hierba y de discos extraños traídos de viajes a la India,pasandon por Marruecos para conseguir un buen taco de hachís.
En Sevilla,la comuna de los Smash,mezcla de hippies sevillanos y algún extranjero que llego para quedarse,tocaban ritmo y blues y bulerías e iban mucho mas alla en el viaje cósmico.
El hippie español intentaba arrasar con todos los obstáculos lingüísticos y musicales y eran incapaces de plegarse a las normas del mercado y de la sociedad,abriendo un camino propio.
A todos ellos se les podía ver confundidos con los jóvenes extranjeros que venían al país de vacaciones.Con sus cabellos largos,sus barbas descuidadas,sus formas de vestir estrafalarias con predomino de prendas orientales,de flores exóticas,todo impregnado tanto de un desaliño general como de una especie de misticismo que pretende marcar la primera frontera con lo establecido.
Esa especie de inconformismo en el vestir,abundantemente decorado con collares,medallones de todo tipo,pulseras,anillos,brazaletes variados como forma de contestar a la vieja generación.
Esas viejas generaciones solo veian la desgana,el abandono de todo lo cabal,el tiempo malgastado.
Pero el hippie español,consecuente con su línea de evitar cualquier choque generacional,no era visto como un peligro,sino como una especie de curiosidad juvenil.
Habia otra forma de ser hippie en España que si era considerada mas peligrosa por las clases gobernantes,aunque su forma de revolución era mas silenciosa...Era como cuando a los hippies norteamericanos les dio por volver a sus raíces.Estoy hablando de los cantantes de Folk,los cantautores que también se lanzaron a la búsqueda de sus raíces musicales y que solian ser de dos tipos diferentes: el folk Singer izquierdista,ya fuera solista o con un grupo detrás,de pelo largo y barba de varios años,con letras comprometidas o surrealistas; y después estaba el grupo de amigos progres liberales,a veces de derechas y católicos,que tanto tocaban en la parroquia del barrio como en las fiestas universitarias,con el par de guitarras y algo de percusión.
La industria discográfica trato de aprovecharse de todo esto y si,por un lado,podias disfrutar de las canciones de Maria del Mar Bonet,tambien lo podias hacer con las canciones de Mocedades.
Entre los nuevos cantautores de las diferentes regiones que surgieron como especie de secuelas de todos los ejemplos de la Nova Canço Catalana y promocionados por el hambre de las casas discograficas,el mas hippie de todos ellos fue Pablo Guerrero,cantando aquello de:
"Estamos amasados con libertad,muchado,pero,quien nos ata?",en " A Cantaros "...
Mientras tanto,en el repertorio musical de las iglesias,sonaba una versión limpia del " Blowin In The Wind",de Bob Dylan y los neo-hippies españoles empezaban un viaje cósmico hacia el infinito.

El hippie español siempre se movio entre el underground,la intolerancia y la burla,y solo el paso del tiempo puso las cosas en su sitio.Hay algunas anécdotas que hablan por si solas de la historia de este movimiento en este país.Por ejemplo cuando el productor Alain Milhaud animo a los Pop Tops a dar un concierto en Pamplona y salieron al escenario en ropa interior y con el cuerpo pintado con todo tipo de dibujos psicodélicos;lo que en San Francisco hubiera sido un hito histórico,se convirtió en una persecución de los espectadores escandalizados hasta que agredieron a el grupo salvajemente.
En 1969,el cineasta Javier Aguirre rodo una españolada con guion de Juan Jose Alonso Millan y Jose Luis Dibildos,en donde se volcaban todos los cliches de los jóvenes melenudos.La película tiene el glorioso titulo de: "Una Vez Al Año Ser Hippy No Hace Daño",y allí vemos a la eterna Conchita Velasco,que haría de hippie reconvertida en mas ocasiones,junto a los geniales Tony Leblanc,Manolo Gomez Bur y un reparto maravilloso: Alfredo Landa,Rafael Alonso,Jose Sazatornil,Laly Soldevilla,y
mas...¿ Se puede pedir mas ? No,Jose Luis Lopez Vazquez no estaba en el reparto.
Ya habíamos oído hablar de yeye's,melenudos,chupagomas y un largo etcétera,y esta película era el claro ejemplo,como siempre desde la burla,de que el hippie se abria paso en las casas de los españolitos de pro...La historia nos hablaba de un grupo musico-vocal dirigido por Manolo Gomez Bur y que se llamaban Los Hippy-Loyas…

En efecto,no es un sueño(o una pesadilla?) y la película es real.Incluso el genial Adolfo Waitzman escribió unas cuantas canciones para la película y cual fue mi sorpresa cuando solo hace unos años,los mas prestigiosos locutores y discjockeys de diferentes radios de Nueva York y Los Angeles,
en los Estados Unidos,elegian algunas de estas canciones como ejemplo de "Spanish Beats" que dicen ellos...Y me gustaría haber visto sus caras cuando les conte  la realidad de esta historia.
En fin,anecdotas aparte,el futuro a los hippies españoles no les preocupaba demasiado,y mas de la mitad de ellos,se incorporarían a la sociedad con el paso de los años,eso si,con la mente limpia.
Por supuesto,tambien hubo mas pioneros y supervivientes,algunos que se reconvirtieron en rockeros de pro e incluso algunos siguieron un proceso que se podía trazar en este camino: Desviarse de los ideales de la mayoría de la gente,sintonizar con otras tendencias musicales y en general,culturales,y por fin,volver a marginarse,por llamarlo de alguna manera.
Aun te puedes encontrar con algunos de ellos en las islas,extraños en un mundo que sigue girando.